Roberto Rodríguez Gómez

Varias novedades se están gestando en el campo de los rankings universitarios internacionales. Uno de los más conocidos, elaborado y difundido por la publicación británica Times Higher Education (THE) con el nombre de “World University Rankings”, contempla modificaciones metodológicas relevantes para producir “una clasificación más rigurosa y transparente”, según informó en noviembre del año pasado Ann Mroz, actual editora del THE.

Desde su primera edición en 2004, el ranking Times fue producido en colaboración con la consultora Quacquarelli Symonds (QS). La principal aportación de QS consistió en recabar la opinión de académicos y empleadores sobre el prestigio de universidades en distintos países. Además, para sistematizar indicadores objetivos sobre las instituciones, el ranking se apoyó en los servicios de la firma, también británica, Evidence Ltd. y en los resultados bibliométricos de Thomson-ISI.

En 2007 se optó por reemplazar los datos del ISI Web of Science sobre publicaciones y citas de los académicos por los indicadores producidos por la firma rival Scopus, perteneciente al consorcio editorial Elsevier. No obstante, en 2009 ocurrieron varios movimientos comerciales que cambiarían la situación. En marzo de ese año Thomson adquirió Evidence, lo que haría cambiar de opinión a los propietarios del THE sobre su reciente convenio con Scopus. Hacia octubre de 2009 se anunció un nuevo contrato con Thomson-ISI, y al finalizar el año se formalizó el término de la alianza entre el THE y la consultora QS.

Quacquarelli Symonds, por su parte, había iniciado un interesante proceso de diversificación del producto World University Rankings. En 2009 publicó, con independencia del THE, aunque conservando los rasgos básicos de la metodología del ranking global, el denominado QS Asian University Rankings, centrado en la clasificación de universidades de la región asiática. Además, dispuso la organización de una gira mundial para ofrecer servicios de consultoría a las instituciones interesadas en mejorar sus indicadores de desempeño, y avanzó en la definición de parámetros regionales como una alternativa a los rankings de carácter global.

Luego de la ruptura con el THE, Quacquarelli Symonds anunció su intención de continuar produciendo la serie QS World University Rankings, esta vez en colaboración con la publicación estadunidense US News and World Report, de larga trayectoria en la difusión de rankings universitarios, con un diario nacional coreano (el Chosun Ibo) y probablemente con otros suplementos o periódicos.

Es de interés consignar que, para el nuevo proyecto, QS ha reclutado a John O’Leary, editor del THE hasta 2007, así como a Martin Ince, quien fuera el editor encargado de la publicación de rankings en el suplemento británico. Conviene recordar que, en buena medida, el ranking Times fue concebido e impulsado por la colaboración entre Ince y Quacquarelli desde principios de la década pasada. Se ha informado, asimismo, que QS sostendrá el contrato con Scopus para la provisión de datos sobre publicaciones académicas y citas bibliográficas.

Así pues, a partir de 2010 el ranking Times se denominará oficialmente Times Higher Education World University Rankings y será producido por la asociación entre el THE y Thomson Reuters.

Para tal efecto, el consorcio Thomson Reuters informa que ha preparado una nueva plataforma para evaluar instituciones universitarias que denomina Global Institutional Profiles (GIP). El objetivo del proyecto, según informa Thomson en su página web, consiste en establecer perfiles institucionales que combinen los siguientes elementos: opinión calificada de pares académicos, indicadores de desempeño, patrones de citas, niveles de financiamiento y características del personal académico. Está prevista la confección de una base de datos global sobre las universidades del mundo que contenga esta información y permita la elaboración de indicadores transparentes. Por ello, Thomson aprovechará sus recursos y experiencia en la elaboración de grandes bases de datos de contenido académico, así como la plataforma de conocimiento construida por Evidence.

Con optimismo, la nueva alianza entre THE y Thomson Reuters promete inaugurar una “nueva era para los rankings internacionales”, compromiso que tiene fundamento si se toma en cuenta la reputación alcanzada por Thomson en materia de sistematización de información académica.

La previsible competencia entre los rankings internacionales THE y QS es digna de observación. Habrá que esperar los resultados para comentarlos y también, en nuestro contexto, habrá que aguardar el efecto de los cambios metodológicos en la clasificación de las universidades del país y de la región latinoamericana.