Quizás para no quedarse fuera de la corriente, la red Universia, auspiciada por el Banco Santander con la colaboración de un millar de uniersidades de la región iberoamericana, difundió en octubre de 2006 el Primer Ranking Iberoamericano de Instituciones Investigadoras R-13.
El ranking ha sido desarrollado por un grupo académico denominado Scimago, con investigadores de las universidades españolas de Extramadura, Granada y Carlos III de Madrid, como parte del proyecto "Atlas de la ciencia". La clasificación se basa en indicadores de productividad científica elaborados a partir de los registros de la base bibliométrica internacional ICI-Thompson.
El R-13 registra a las instituciones de investigación iberoamericanas que en el periodo 1990-2004 acumularon al menos cien documentos en la base de referencia, lo que da como resultado un total de 619 instituciones, públicas o privadas, de nueve países: Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, España, México, Portugal y Venezuela. Aunque la mayoría de las instituciones del ranking son universidaes, no están ausentes los centros, institutos, sistemas de salud, hospitales, fundaciones, entidades de la administración pública, organismos no gubernamentales, departamentos de investigación de empresas, así como cualquier otra entidad en que se realiza investigación en alguna o varias de las 24 áreas consignadas en la base ICI-Thompson.
El instrumento desarrollado por el Scimago -una base de datos interactiva- permite varias lecturas y clasificaciones. Se ofrecen resultados jerarquizados por región (iberoamérica y latinoamérica), país, institución, área científica, año y periodo, y por cada uno de los cuatro indicadores de productividad construidos: producción total, producción citable, producción ponderada, y factor de impacto medio normalizado.
Por ejemplo, al considerar el número de instituciones por país que cumplen el criterio de más de cien documentos en la base durante los quince años del periodo de observación, España encabeza la lista con bastante holgura: 261 de sus instituciones de investigación cumplen con ese criterio. Le siguen Argentina (110), Brasil (85), México (74), Portugal (29), Chile (26), Cuba (15), Venezuela (10) y Colombia (9). Esta jerarquía combina dos criterios: productividad y diversidad institucional de la investigación científica.
Al elaborar una clasificación de la producción científica total bajo un criterio más restringido (al menos cinco mil documentos durante el periodo 1990-2004) la lista se reduce a treinta y cinco instituciones con esa capacidad. De ellas, 17 de España, siete de Brasil, cuatro de Portugal, tres de Argentina, dos de Chile y dos de México (la UNAM y el CINVESTAV). Este ordenamiento da un claro indicio del liderazgo de los sistemas de investigación y desarrollo tecnológico de España y Brasil.
Las diez primeras instituciones de Iberoamérica, según su capacidad científica, son: el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de España, la Universidad de San Paulo, la Universidad de Barcelona, la UNAM, la Universidad Complutense de Madrid, la Universidad de Buenos Aires, la Universidad Estatal de Campinas (Brasil), la Universidad Autónoma de Barcelona, la Universidad de Valencia, y la Universidad Federal de Río de Janeiro. Tómese en cuenta que el CSIC, más que una entidad de investigación, es un organismo gubernamental con funciones de coordinación.
Aparte de la UNAM, la lista iberoamericana de las primeras cien instituciones de investigación incluye al CINVESTAV, en el lugar 28, a la UAM en el 48, el IMSS en el 57, el Instituto Nacional de Nutrición en el 73, y el IPN en el 76. La primera institución privada mexicana es el Tecnológico de Monterrey, en el lugar 193.
La UNAM es una de las pocas instituciones de Iberoamérica que registra producción científica indexada en todas las áreas de conocimiento. Además, en la mayoría de éstas obtiene resultados destacados. En quince de las 24 áreas de conocimiento del ICI-Thompson, la Universidad Nacional figura en los primeros cinco lugares de Iberoamérica: agricultura, genética, biología, alimentos, materiales, ciencias de la tierra, ciencias sociales, derecho, filología y filosofía, física, historia y arte, matemáticas, y sicología y ciencias de la educación.
Dejando fuera las instituciones de España, la UNAM aparece como la principal institución de investigación en las áreas de ciencias de la tierra, ciencias sociales, filología y filosofía, y sicología y ciencias de la educación. Además como la segunda en genética, biología, ciencia y tecnología de alimentos, ciencia y tecnología de materiales, física, matemáticas y química, campos en los cuales es aventajada por la Universidad de San Paulo, así como en Historia y Arte en el cual El Colegio de México obtiene la primera posición.
Las disciplinas en que la UNAM cae fuera del rango de las primeras diez primeras instituciones de investigación de Iberoamérica son: economía (38), informática (18), ingeniería electrónica (21), medicina (12), tecnología electrónica (21) y tecnología química (11). Sin duda, áreas de oportunidad para esta casa de estudios.
Vale la pena recalcar, antes de concluir, que los puntos y posiciones del ranking R-13 reflejan exclusivamente la producción académica indexada en el ICI-Thompson, lo cual refleja, en el mejor de los casos, el impacto internacional de la actividad científica, pero no necesariamente su pertinencia social o su valor educativo.
Ya hablaremos de eso en la próxima entrega.